Uno de los mayores atractivos para los adultos mayores y jóvenes en general, el bingo ha llegado a convertirse en un entretenimiento que une amigos y combina la diversión con la posibilidad de ganar dinero.
Muchos asumen que el origen del bingo se remonta en la época del Imperio Romano que para entonces se jugaba sobre una tabla en la que debían completar los símbolos y figuras que ésta traía tallada a medida que iban sorteando las fichas.
Por otro lado, hay quienes cuentan que el bingo tal como se conoce hoy en día nace en Italia durante el siglo XVI, en un principio llevaba por nombre “Lo Giocco del Lotto d’Italia”. No fue hasta 1770 que este juego llegó a Francia bajo el nombre de “Le Lotto”.
Para el siglo XVIII ya se había esparcido por toda Europa, siendo un juego que solo estaba al alcance de la aristocracia. Cuando el bingo se introduce en Alemania éste toma un carácter educativo dentro de los colegios, pues los niños aprendían a deletrear y conocían la historia de su país.
La matemática también era aplicada bajo este sistema de juego. Cuando llega a Estados Unidos lo hace como Beano. Pero, en 1930 Edwind S. Lowe, un fabricante de juguetes renombró el Beano como “Bingo” luego de que alguien, por equivocación, gritará “Bingo” al completar su cartón.
Ya en 1934 este juego era muy popular en todo el mundo, siendo uno de los preferidos por los adultos jóvenes y personas mayores en general. Multiplicar el dinero apostado siempre será un gran atractivo ¿o no?
Ganar dinero por diversión
El objetivo del bingo siempre será ganar, doblar o cuadriplicar el dinero que has apostado. Por ello, es necesario tener en cuenta los siguientes consejos al momento de jugar:
Juega varios cartones, sin embargo, ten presente que tendrás que estar atento a los números que sean cantados, entre más cartones más trabajo y mayor atención.
Escoge bien los cartones según el tiempo de duración del bingo. Excelente consejo para aplicar en el bingo de 75 bolas. Al momento de escoger los cartones presta atención a los cartones más cercanos al número 1 o al 75.
Los cartones que contienen los número de en medio son muy estratégicos, no los dejes de lado.
Juega en salas de bingo donde la cantidad de jugadores sea relativamente pequeña, esto aumentará tus posibilidades de ganar.
Llega al bingo a tiempo, entrar a la partida 30 minutos luego de haber empezado reducirá tus posibilidades.
Decide bien el lugar donde te sentarás, pues esto influye mucho. Procura un asiento lejos de distracciones y con una buena iluminación.
Tu atención debe estar puesta al sorteo de las bolas, pasar por alto un número podría costarte el juego.
Siempre será una buena consideración jugar con menos cartones pero jugar más partidas.
Selecciona aquellos cartones cuyos números no sean parecidos, así tus oportunidades de ganar serán más amplias.
La emoción que lleva inmersa la palabra Bingo al ser pronunciada durante una partida es realmente increíble y contagiante. De hecho, se ha llegado a emplear en situaciones donde se logra alcanzar un objetivo.
¡A cartón lleno!
La palabra Bingo se ha convertido en un sinónimo de ganancia, de logro. En definitiva este juego es sencillo de jugar y sus alcances han sido maravillosos, sigue funcionando como un método educativo dentro de los colegios y los hogares.
Tanto chicos como grandes pueden disfrutar del emocionante Bingo, que también es utilizado en eventos con fines. Sin duda, uno de los mejores inventos cuando de lúdicos se trata.
¡Elige tus cartones, juega y canta Bingo!